Por: Alejandro Glade R.
Las líneas aparecen en casi todas las escenas, pero sólo algunas se convierten en elemento dominante a causa de los caprichos de la luz, del ángulo de toma o de la composición del tema. Haga uso de las líneas siempre que sea posible.
Su atractivo resulta irresistible para la vista. Líneas onduladas, curvas o rectas…todas van a alguna parte y se llevan a la vista con ellas.
Las líneas rectas y atrevidas, que cortan la imagen diagonalmente, dan vigor al encuadre. Las líneas onduladas horizontales, por el contrario, le comunican tranquilidad.
Las líneas marcadas dan profundidad.Una carretera, una valla, una
hilera de árboles o cualquier otra alineación claramente marcada subraya la
sensación de profundidad de la escena.
Las líneas diagonales son dinámicas.
Las líneas diagonales proporcionan una sensación de movimiento y vitalidad mayor que las líneas horizontales o verticales.
Si quiere Ud. Dar a la imagen ese vigor, busque un ángulo de toma en el que aparezcan abundantes líneas diagonales.
Escrito por: Alejandro Glade R.