domingo, 21 de enero de 2024

Consejos para composiciones de fotografías.

 Por: Alejandro Glade R.

Normalmente o la mayoría de las veces nos dejamos llevar por las exigencias técnicas de la mayoría de las cámaras. Si queremos comenzar como nuevo fotógrafo es importante que desarrollemos nuestras propias habilidades para la composición. Será la clave de tu poder para las hacer una gran fotografía.

Como primera cosa debemos saber que es una composición, normalmente los principiantes tienen un conocimiento equivocado en esta habilidad y que no es muy fácil i imposible de mejorarla.

Foto Alejandro Glade R.   Holanda

  ¿Que es la composición?

Una composición no es una serie de reglas que debemos seguir. La regla de los tercios, las líneas principales y la simplicidad son pautas que tienen el único propósito de hacernos ver aquello que antes no veíamos.

Todas estas "reglas" nos hacen conscientes de lo que debemos respetar como básico. La regla de los tercios, por ejemplo, nos enseña a ver nuestro marco en tres secciones separadas, vertical y horizontalmente. Las líneas principales abren nuestros ojos a todas las líneas visuales que nos rodean.

Nuestra mayor culpa sería…

Si sólo nos preocupamos únicamente en  las  reglas de composición, estamos permitiendo que nuestra visión sea limitada. Lo que Ud. debe hacer es utilizar estas reglas de composición para lo que están destinadas,  abrirnos los ojos y aprender a observar.

Entonces, ¿cómo debemos actuar al abrir los ojos para capturar la mayor belleza visual posible? ¿Y cómo podemos hacerlo rápidamente siendo nuevos en el arte de la composición?

Esto que les estoy diciendo en esta publicación servirá para guiarles por el camino para mejorar. Les entregaré estas formas sencillas pero efectivas de abrir los ojos y aprender a ver (porque muchas veces miramos pero no vemos), en consecuencia, esto hará que mejoraremos nuestras composiciones.

1. ¿Que espacio visual tenemos?

Cada una de las tomas que hacemos están compuestas de un espacio visual. Tenemos un tema, fondo, primer plano y elementos secundarios.

   

Foto Alejandro Glade R.  Amsterdam

Es la disposición de estos lo que determina el impacto en el espectador.

La mayoría de los principiantes componen sus fotografías de la siguiente forma: ven un sujeto, apuntan su cámara hacia el sujeto y toman la fotografía.

Por lo que estas composiciones tienden a tener al sujeto en el centro con poca atención al fondo, al primer plano o a los objetos a la izquierda o a la derecha. Como resultado, la imagen tiende a parecer desordenada y difícil de seguir.

El primer paso para mejorar tus composiciones es simple. Toma conciencia de todo el espacio visual dentro de tu marco.

Encuentre el sujeto que desea capturar y luego procure observar todos los elementos dentro de su encuadre.

¿Qué objetos están a la izquierda de tu sujeto? ¿Qué tal la derecha? ¿Arriba? ¿Abajo?

¿Qué colores están presentes? ¿Cuáles llaman más la atención? ¿Cuáles pasan desapercibidas y quedan ocultas?

Este reconocimiento nos permitirá  controlar mejor la composición.

No podemos cambiar lo que no sabes que existe, por lo que hay que trabajar con lo que realmente vemos.

Por lo que debemos empezar de forma sencilla explorando el mundo visual que nos rodea. Cuando descubramos una gran fotografía u obra de arte, analízala. ¿Qué haremos como fotógrafos con el espacio que tenemos al frente?

Todos los fotógrafos tenemos más o menos el mismo visor. Pero son pocos los que logran convertir ese espacio vacío en algo impresionante.

Para ser grande tenemos que entender que el control sobre este espacio visual es la clave. Por lo que debemos controlar este espacio. El control de este espacio visual nos permite guiar al espectador exactamente donde queremos. Tú muestras lo atraerá la mirada. Tú muestras lo que mirarán primero. Y tú con lo que muestras induces cómo responderán emocionalmente.

El saber cómo controlar y guiar al espectador, será solamente por la intuición.

Existen varias técnicas que le permiten hacer precisamente eso. Exploremos más de ellos…

2. Debemos encontrar y acentuar patrones.

Si no tenemos luz, tendremos un marco 100 por ciento negro. En la medida que vamos agregando luz, comienzan a aparecer las líneas y las formas. Y con esto, aparecen los patrones.

Encontrar patrones visuales y responder a ellos es un hábito natural de nuestra mente.

Foto Alejandro Glade R,  Alemania

Los objetos del mismo tamaño, color, forma o intensidad de luz tienden a clasificarse como similares. Esto permite que nuestra mente flote más allá de estos elementos similares hasta la siguiente novedad visual.

¿Qué pasa cuando miramos un paisaje? Hay miles y miles de hojas, ramas, pero tu mente filtra este exceso y genera una forma: la típica construcción y los árboles que dibujan los niños en el colegio cuando están chicos.

Sin embargo, cuando nuestra mente mira una fotografía, los patrones se vuelven mucho más difíciles de encontrar.

Sin la capacidad de ver la “profundidad” en una imagen, todo se comprime en una sola dimensión. Si la imagen no está compuesta de manera que esta toma unidimensional sea fácil de captar y utilice patrones, muchos la pasarán por alto.

La forma de evitar esto es componer sin desorden.

Los patrones están por todas partes. Ser más consciente de estos patrones hace que la composición sea mucho más fácil.

Los patrones crean simplicidad, lo que hace que los espectadores encuentren su fotografía más fácil de digerir. Al atraer a los espectadores con un patrón, puedemos guiarlos de esquina a esquina, permitiéndoles explorar las sutilezas de la imagen.

3. Facilitar la visión de entrada.

Lo más difícil en una composición es lograr que el espectador “entre” en el encuadre. Una vez logrado esto, todo lo demás es secundario.

Afortunadamente, el uso de introducciones hace que este proceso sea bastante sencillo.

Las introducciones son simplemente señales visuales que guían a los espectadores hacia el contenido de su marco. Están construidos de la misma manera que construirías una introducción al mundo físico real.

Si quieres que tu casa luzca acogedora, ¿dejas la puerta abierta o cerrada? Cuando saludas a un amigo, ¿cruzas los brazos formando barreras horizontales o abres los brazos en una imagen diagonal, produciendo líneas imaginarias hacia tu cuerpo?

Foto Alejandro Glade R.  Holanda

Las entradas guían al espectador desde las esquinas del marco hacia las áreas interiores. Suelen formar líneas imaginarias que guían a los espectadores.

Una figura en primer plano que mira hacia el centro del encuadre es un ejemplo típico, al igual que un arco en silueta que lleva a los espectadores a mirar dentro del contenido del contorno.

El uso de introducciones hace que las composiciones sean más fáciles de entender, ya que brindan un camino rápido y fácil a seguir para los espectadores. En lugar de observar la imagen y tratar de determinar qué mirar, los espectadores siguen intuitivamente la introducción. Esto hace que la comunicación visual sea más fácil y eficiente.

Sin embargo, ni siquiera la mejor introducción salvará una fotografía que sea demasiado compleja para que los espectadores la comprendan.

4. Mantener una imagen simple sin importar la complejidad de la composición.

Es fácil tomar fotografías con docenas de elementos diferentes dentro del marco. Captar una imagen con varios elementos cuidadosamente estructurados en un todo coherente y simplista es mucho más difícil.

 ¿Cómo compondremos imágenes con sencillez?

Para partir, recordemos que la fotografía se compone de espacio visual. Y no todo este espacio visual es igual. Algunos elementos destacarán másque otros.

Y elementos de los más diversos chocarán entre sí.

Muchos serán los colores diferentes que competirán por la atención, al igual que varios objetos de diferentes formas, tamaños y profundidades.

Al eliminar la multiplicación de elementos variables y centrarse en unos pocos, simplifica su imagen.

¿cómo se aísla, además de utilizar poca profundidad de campo o perspectiva?

5. Debemos buscar y controlar las señales visuales más importantes.

Cuando muchos piensan en simplicidad, generalmente les viene a la mente la idea de poca profundidad de campo y perspectiva. Disparar desde abajo o desde arriba funciona muy bien para reducir el desorden del fondo y centrar la atención del espectador en el sujeto.

Las señales visuales fuertes influyen mucho más que las debiles.

Los colores extremadamente brillantes, las trampas de luz (áreas de brillo extremo rodeadas de áreas más oscuras) y las formas fuertes son ejemplos de señales visuales fuertes que atraen naturalmente nuestra atención.

Foto Alejandro Glade, Kinderlijk Holanda

Las señales visuales fuertes, sin importar si están en el fondo de una imagen de poca profundidad de campo tomada desde arriba, robarán toda la atención.

Cuando tienes múltiples señales visuales fuertes combinadas dentro de un cuadro, tiendes a producir confusión y evitación.

Evite esto asegurándose de que la señal visual más fuerte sea su tema principal.

Si otros elementos secundarios tienen fuertes señales visuales, trabaje para eliminarlos o minimizarlos a través de su composición. Párese de puntillas, agáchese o utilice una distancia focal diferente que elimine estas señales visuales.

Esto simplificará su imagen y producirá ese efecto de "foco" que guía a los espectadores exactamente hacia lo que desea.

6. Como será el marco

Aquí hay una pequeña revisión rápida de la composición. Cuando sales y tomas fotografías, ¿qué estableces como las cuatro esquinas de tu encuadre?

Si eres como la mayoría, confías en el visor de tu cámara para hacer esto. Si bien es conveniente, obligarse a ver el mundo a través del visor de su cámara le quita control y creatividad…Pero está también la edición posterior…

Básicamente, estás siguiendo las pautas del "encuadre" de tu cámara e intentando con todas tus fuerzas llenar este encuadre con lo que se puede etiquetar como una composición "hermosa".

¿Dónde quieres que estén las cuatro esquinas del marco?

Una vez que haya decidido esto, use su cámara como lo que es, un instrumento o herramienta. Capture la imagen y visualice la relación de aspecto exacta. Aunque es posible que su cámara no cree la relación de aspecto que desea, un recorte rápido en cualquier editor de fotografías puede solucionar este problema en segundos.

7. La libre interpretación

Nos hemos centrado bastante en controlar la experiencia visual de los espectadores. Si bien esto puede parecer un enfoque extraño para la fotografía, la composición no es más que el diseño de la experiencia visual de un usuario. Grandes composiciones crean grandes fotografías.

 Una gran composición es más que una simple imagen llena de instrucciones. El verdadero arte de la composición está en la definición.

Foto Alejandro Glade,   Amsterdam

Hay que componer para guiar al espectador hacia tu encuadre. Hay que simplificar para no confundir ni molestar. Pero también queremos que el espectador sea un participante activo en el trabajo visual.

Una imagen fácil de entender suele ser tan aburrida como una imagen complicada y demasiado difícil. Las grandes composiciones, aunque suelen ser visualmente simples, contienen un elemento que las define. Un elemento de intriga. Un elemento sobre el que, si preguntas a 1.000 personas, obtendrás 1.000 interpretaciones únicas.

Es aquí donde está la verdadera belleza de una composición. Porque yo creo que la belleza,  está en los ojos del observador.

Escrito por: Alejandro Glade R.





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